"Hay hombres un día y son buenos. Hay otros que luchan un año, y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay unos que luchan toda la vida: esos son los imprescindibles."
A los fieles hombres de la revolución, a los hijos de la
tierra, de la montaña, del cultivo y del río. Al hijo que honra a padre y madre, al pueblo y a la tierra que
pisa y el aire puro que respira, todo lo bueno de la vida no podrá nunca ser
negado, porque con voluntad y conciencia de hierro lo han conquistado. Al
hombre detrás del limitante vidrio, que se encuentra detrás de los barrotes que
están después de los gruesos muros de la desvergüenza y el cinismo; extendemos
nuestro más fuerte y caluroso abrazo, como símbolo de fraternidad y hermandad,
expresión de nuestra más firme voluntad de respaldo y solidaridad.
Bertolt Brecht.
Pasa el tiempo y crecen en número y en altura los muros del
castigo y la tortura. Se amplían y construyen nuevos edificios con más cajones
para encerrar y castigar, con la burda excusa de corregir. Desde cómodas y
frescas oficinas se pretende somete a muerte lenta, la voluntad humana.
Sabemos que la prisión del cuerpo nunca ha
significado para ustedes queridos compañeros, la prisión de la conciencia y que
ha sido tal determinación la virtud que hoy nos permite extenderles estas
líneas de afecto en las que esperamos serán sus últimas noches bajo el amargo
yugo de la criminal penitenciaría y que mañana dejará vernos construir un justo
porvenir con el pueblo que trilla las montañas y los valles de esta tierra de
todos. Un feliz fin de año y un
venturoso porvenir en el 2017, les desea la Corporación Semilla y Memoria,
integrante de la Coalición Larga Vida a las Mariposas.
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